Material volátil

Algunos negocios tienen periodos estacionales de reclutamiento. Mientras durante todo el año hay una cierta rotación (casi natural), llegan épocas del año en las que el reclutamiento se dispara.

Un ejemplo claro es el sector de la hostelería.

No pasaría nada si nuestro país no fuera uno de los principales destinos del turismo mundial pero, varia sveces al año, de repente, todo el sector se pone a la caza y captura de los candidatos necesarios àra las necesidades de semana santa, verano o Navidades. Todos entran en un frenesí reclutador a la vez.

Algunos publican ofertas algunos días antes que el resto a la espera de tener una bolsa de candidatos para cuando llegue el momento, pero olvidan que no están solos. Algunos de estos cometen el error de creer que el candidato esperará su llamada… y cuando se ponen en contacto con él ya no está interesado en la oferta y/o ya ha cerrado un acuerdo con otra Compañía.

Es importante conocer la “fidelidad” del candidato a una oferta, saber la tipología del candidato que se va a apuntar, lo mucho (o poco) que puede necesitar el dinero, la oferta que se genera en el mercado, etc.

El reclutamiento en cada sector y perfil distinto tiene un tempo que hay que conocer.