Innovación no existe

Voy a volver a escribir, esta vez sobre Innovación. Llevo mucho metido en el tema, empiezo a tener claras algunas cosas y necesito hacer el ejercicio de explicarlas para ver yo mismo si tienen sentido o no.

Hace ya dos años que montamos el departamento. En aquel entonces estuve investigando muchísimo sobre lo que era y el resultado de mi investigación fue una presentación sobre como iba a ser el mundo en diez o quince años y como sería el mundo del trabajo entonces. Desde allí hacía un análisis de lo que nos separaba y trazaba lineas para conseguirlo. Me basé en estudios de McKinsey, de decenas de análisis de tendencias, etc. Que sí las tecnologías móviles, que si los enjambres de trabajadores, que si el teletrabajo, que si lo cloud… y proponía investigaciones en diversas lineas de productos.

Yo venía de un departamento de producto, con product manager, gente de marketing, datos, developers, qa y toda la parafernalia. Testeábamos, aprendíamos cambiábamos cosas, éramos ágiles, la cagábamos, llamábamos a los usuarios para preguntarles en caliente y corregíamos en cuestión de horas. En un año y medio cambiamos entera el alta de empresa, automatizamos la validación, cambiamos por completo la inserción de oferta, la automatización de los upsellings, creamos un sistema de testeo multivariable y muchas otras cosas. A partir de ese momento, sin recursos asignados al nuevo departamento, debíamos “innovar”. Lo intentamos con proveedores externos (recomiendo a uno de nuestros principales proveedores, ASPGems), pero el problema era yo. El “no debemos tener miedo a equivocarnos” es una frase muy de moda que es más fácil de decir que de implementar en una compañía.

Ha sido después de dos años de picar piedra cuando he encontrado algo que hace que todo encaje. Hoy, dos años después, me doy cuenta que innovación no es producto sinó quizás método y algo MUY sistémico. Quizás innovación no es nada en concreto.

Éste ha sido mi camino.

Liz Sanders me hizo ver una lucecita
Todo empezó cuando, supliendo a una compañera que tenía que ir a una formación sobre Scrum en Barcelona, fui a Madrid a un workshop de dos días sobre CoDiseño que impartía Liz Sanders. Volví a la oficina con la sensación de tener mun montón de cosas en la cabeza que empezaban a cobrar forma. Preguntarle a los clientes no era la clave; la clave era más compleja: era saber preguntar, era hacerles parte de la solución, etc.

Después de eso contacté con la gente de DesignIt (Mercè Graell i otros del equipo, pero Mercè en especial) y les bombardeé con el montón de dudas que me habían surgido después del workshop. “Oye, y esto dónde va?” era mi principal duda? Entiendo que es un proceso y tengo claro lo que obtienes… es lo que yo hice hace dos años (de otra forma) y obtuve ideas… que no hemos implementado.

The Little Black Book of Innovation (Parte I)
Vaya, un libro que habla sobre cómo implementar la Innovación! El pequeño libro negro sobre innovación (Little black Book of Innovation) de Scott D. Anthony. Empezó muy bien y con ejemplos de qué hacían grandes marcas desde sus departamentos de Innovación. En los primeros capítulos me habló de The Innovator’s Dilemma como uno de los referentes del sector, dejé apartado éste, me descargué el otro y…

The Innovator’s Dilemma
Este fue mi siguiente paso: el médico, el que me dice porqué no funciona el método que he aplicado. Descubrí Audible.com y compré The Innovator’s Dilemma (se oye fatal, por cierto). A parte que se oye fatal, no me aportaba soluciones (almenos hasta donde me cansé de escucharlo). Describía las penalidades que había pasado desde que creamos el departamento, lo que cuesta convencer a los inversores internos, lo que cuesta obtener recursos, demostrar aprendizajes, encajar en lineas de producción que van a cien por hora, etc. Las empresas grandes no pueden innovar, escíndete, etc. Bien, vale. Pero no me ha funcionado. Necesito más ideas.

The Innovator’s Dilemma no me sirvió para saber qué más hacer sinó saber que lo que nos había pasado suele ser habitual. Volví al Little Black Book of Innovation.

The Little Black Book of Innovation (Parte II)
Después de la desilusión de The Innovator’s Dilemma seguí escuchando el Little Black Book of Innovation. Genial. Redondeó lo que Liz Sanders y Mercè Graell me habían puesto sobre la mesa. De aquí saqué la idea de cómo hacer encajar los métodos de codiseño en una organización… pero seguía sin saber qué hacer con los productos “tradicionales”. Innovación es “algo nuevo que tiene impacto” dice. Pero de dónde saco recursos para poder hacer todo esto?!

“Get off the building” y la historia de Procter and Gamble me resultaron reveladoras. “Qué obviedad”, pensaba… “qué obvio es lo que dices” me dicen ahora… pero porqué no lo hacemos? Qué hacemos en lugar de eso? Y si no hay Departamento de Innovación sino que conseguimos que toda la organización lo sea? Pero esto no resolvía aún mi principal problema: todos innovamos, pero quien lleva la casa?

The Lean Startup
Oh. Eric Ries se merece un aplauso por The Lean Startup. Aquí es donde todo ha encajado. Aquí es donde he conseguido poner en su sitio la agilidad, el “get off the building”, los “para-qué”, la co-Creación, lo Lean, lo del miedo a equivocarse y un largo etcétera. No sé si el libro por si solo hubiera tenido este impacto en mi, pero como culminación (por ahora) de un proceso, me ha ayudado a presentar una propuesta de (sólo!) 14 diapositivas con las “4 things the Innovation Department should do“…

… pero esto forma parte de otro post.